El restaurante Tinglado en Boadilla del Monte ha reabierto sus puertas después de una renovación completa de decoración y carta. Una decoración que recuerda a los clásicos bistrós franceses en su interior, combinado con una amplia terraza y un club privado en la segunda planta donde rematar tomando algo y con música en directo. En su nueva carta, la cocina de Tinglado alcanza a la sofisticación a través de la sencillez, gracias a la cuidada selección del producto. Un restaurante perfecto para una comida o cena en pareja, con amigos o en familia. Os contamos nuestra experiencia.
Exterior del restaurante Tinglado, en Boadilla del Monte.
Nos encantan los restaurantes del grupo Barbillón porque son un acierto seguro. Así que, cuando supimos que Tinglado en Boadilla del Monte había reabierto sus puertas después de una amplia renovación del espacio y del concepto gastronómico, no pudimos resistirnos a reservar para una cenita.
El restaurante Tinglado, en Boadilla del Monte cuenta con una amplia terraza.
El nuevo espacio de Tinglado es una preciosidad que ha mantenido la importancia de su gran terraza en la parte delantera del local, que se comunica con un cristal abatible con el interior del restaurante.
La decoración del interior del restaurante Tinglado recuerda a los bistrós franceses.
El interiorismo renovado de Tinglado evoca a los bistrós franceses, con protagonismo de la madera y de las preciosas tapicerías y una iluminación tenue con lamparitas en cada mesa que favorece la intimidad de cada grupo de comensales.
El restaurante Tinglado acaba de abrir un club privado en su segunda planta.
Además, en la parte superior del restaurante, Tinglado acaba de inaugurar un club privado en el que los viernes y sábados, podremos alargar la velada disfrutando de un cóctel y música en directo.
La carta del restaurante Tinglado apuesta por los platos tradicionales con un toque viajero.
La nueva carta de Tinglado, completamente renovada, ha creado una propuesta que combina los productos de calidad a los que nos tiene acostumbrados el Grupo Barbillón, con platos tradicionales pero con una vuelta de tuerca que combina la modernidad con inspiración viajera.
Gildas de steak tartar en el restaurante Tinglado.
Nosotros optamos por propuestas frescas, más apetecibles con altas temperaturas, como un gazpacho de sandía, deliciosamente refrescante; y seguimos con unas gildas de steak tartar, una combinación que, a priori, no esperas que maride tan estupendamente y que está riquísima. Las croquetas de chorizo ibérico rematadas con un huevo de codorniz fueron otro de los entrantes que degustamos, un bocado suave y diferente que nos encantó.
Uno de los platos más refrescantes en Tinglado es la burrata con escalivada.
Después de los entrantes, optamos por algo refrescante que nos hiciera de tránsito entre primeros y segundos. No queríamos la clásica ensalada, así que optamos por probar la burrata con escalivada. Un acierto de plato, muy bien marinado con especias y frutos secos y que lleva los pimientos en la base y el queso en la parte superior. Una opción ligera y muy rica.
Sándwich de roast beef con mojo picón y espárragos a la brasa con salsa holandesa de guarnición.
Seguimos con los platos principales y elegimos el sándwich de roast beef con mojo picón, otra de las revelaciones culinarias que nos sorprendió muy gratamente por la combinación de sabores tan acertados con ese guiño canario. Las guarniciones en Tinglado no son un mero acompañamiento, son una declaración de intenciones, platos con entidad en sí mismos, que forman parte de la carta como un plato más. Nosotros, como acompañamiento del sándwich de roast beef optamos por unos espárragos a la brasa con salsa holandesa que estaban impresionantes.
Hamburguesita de wagyu con queso Arzúa y mermelada de pepinillos, acompañada de patatas fondant.
También probamos la hamburguesita de wagyu con queso Arzúa y mermelada de pepinillos, un bocado que los amantes de las Burger no pueden perderse porque es una de las más deliciosas que hemos probado nunca. En este caso, como acompañamiento, optamos por una cazuela de patatas fondant que podrían ser un plato único con suficiente entidad propia.
La Tarta Árabe del Grupo Barbillón es el postre estrella de la casa.
Ir a cualquier restaurante del Grupo Barbillón y no terminar con su consagrada Tarta Árabe sería una ofensa para un buen paladar. Es, sin lugar a dudas, uno de nuestros postres preferidos y, además, en Tinglado la sirven de una manera muy especial, ya que el jefe de sala, Diego, la “montó” en una mesa supletoria bajo nuestra atenta mirada, alternando las obleas de hojaldre con la crema pastelera. De esta manera, se consigue la perfección de la crema y del hojaldre, que llegan a la boca del comensal con la consistencia ideal.
Y después de una cena de fin de semana, si queremos continuar con la noche, no es necesario moverse de Tinglado, ya que el restaurante de Boadilla acaba de inaugurar su propio club privado, en la segunda planta, donde disfrutar de música en directo y tomar un cóctel relajadamente.
Tinglado. Avenida Siglo XXI, 13. Boadilla del Monte, Madrid. Reservas en el teléfono 916 330 143. Horario: De domingo a jueves, de 13 a 00 horas. Viernes y sábados, de 13 a 2 horas.
