Por qué tus hijos deben ir a un campamento de verano en el extranjero

Los veranos de la infancia son una etapa que se recuerda toda la vida. Sin embargo, lo que antes era una simple temporada de descanso ahora puede convertirse en eso que los ingleses y americanos llaman “a lifechanging experience” (es decir, una experiencia transformadora). Si estás considerando a qué campamentos pueden ir tus hijos este verano… un campamento en el extranjero podría ser una de las mejores decisiones que tomes, de esas que no olvidarán nunca.

Son ya décadas los que se llevan ofreciéndose este tipo de programas y se mantienen en marcha porque los viajes al extranjero, estudiar en otros países es mucho más que un simple viaje: abre la mente, fortalece el carácter y prepara a los niños para enfrentarse con seguridad a un mundo lleno de oportunidades y diversidad.

Te damos cinco razones por las que tu hijo no debería perdérselo

1. Aprenderá o reforzará otro idioma de forma natural

Uno de los principales beneficios de un campamento en el extranjero es la inmersión lingüística. En estos entornos los niños se ven rodeados por el idioma todo el día, lo que acelera su aprendizaje sin que lo sientan como una obligación académica. Hablar con compañeros, jugar, hacer excursiones… convivir, en resumen, en otro idioma les supondrá un gran esfuerzo, pero también les dará una experiencia tremendamente gratificante. Y además, se aprende mucho más rápido que yendo a las clases de toda la vida.

2. Ganará autonomía y seguridad en sí mismos

Salir de casa y enfrentarse a nuevas rutinas, comidas, horarios y culturas, hace que los niños desarrollen una independencia valiosísima. Aunque al principio les dé un poco de respeto, en pocos días aprenden a resolver pequeños problemas por sí solos, a pedir ayuda cuando lo necesitan y a tomar decisiones que les ayudan a ganar confianza. Es importante, eso sí, que estés seguro de que el niño está preparado emocionalmente para esa separación. La nostalgia puede ser difícil de manejar a determinadas edades. Piensa también que no hay prisa. Deben disfrutar de una experiencia tan increíble. A veces vale la pena esperar un año o dos si están muy apegados a la casa y la familia. Es fundamental que el niño quiera ir.

3. Hará amigos de todas partes del mundo

Una de las grandes riquezas de estos campamentos es la diversidad. Los niños conviven con otros jóvenes de diferentes países, lo que no solo les ayuda a practicar el idioma, sino también a conocer otras formas de pensar, tradiciones y formas de vida. Estas amistades, muchas veces, duran más allá del verano y les ofrecen una perspectiva global desde muy temprana edad.

4. Se alejará de las pantallas y conectará con el mundo real

Aunque parezca difícil hoy en día, en los campamentos de verano los niños se olvidan del móvil. Sí, sí, como lo oyes. Están tan ocupados con actividades al aire libre, juegos, deportes y excursiones, que apenas piensan en las redes sociales o los videojuegos. Tardarán un par de días en “desengancharse”, pero valdrá la pena. Este tipo de desconexión, aunque temporal, les ayuda a reconectar con lo esencial: la naturaleza, el contacto humano, la creatividad y el tiempo libre bien aprovechado. Les da una visión del mundo que hoy es difícil sentir. ¡Todo un retiro espiritual!

5. Volverá a casa con una mente más abierta y conociendo el significado de la resilencia

Los desafíos que supone viajar y vivir durante unas semanas fuera de casa hacen que los niños crezcan por dentro. Muchos padres notan que sus hijos vuelven más maduros, tolerantes y con mayor capacidad de adaptación. Y es que enfrentarse a lo desconocido -y disfrutarlo- deja una huella positiva en su desarrollo emocional y social.

Como el niño, tu también debes estar seguro

Tan importante es que el niño esté seguro de querer vivir esta experiencia como que lo quieras tu como padre o madre y que tengas absoluta confianza en la empresa con la que vaya el niño. Es importante que elijas un programa que te dé tranquilidad y garantías. Hay muchas opciones en el mercado y siempre hay programas que, por su veteranía, dan seguridad, como los que pone en marcha EF Education First. Esta es una de nuestras empresas de confianza con la que trabajamos desde hace mucho tiempo, pero es una de ellas. Investiga y escoge la que mejor “feeling” te dé.

Acerca de Diana

Soy periodista, emprendedora, amante del teatro (sobre todo infantil) y de los buenos planes (en familia, en pareja, entre amigos, en solitario...). Un día, después de un montón de casualidades, decidí lanzarme a la aventura de poner en marcha mi propio proyecto profesional: Mamá tiene un Plan. Hoy, tengo tres peques y muchas ilusiones, a los que dedico todo mi tiempo y energía. En el viaje me acompaña un hombre maravilloso (al que dedico menos tiempo del que me gustaría y quiero con locura) y una gran familia a la que adoro que hace posible que todo lo demás siga girando. @Diana_M_N

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