La localidad de Arévalo en Ávila, es la segunda ciudad más grande tras la capital y tiene una gran importancia histórica también, ya que fue fundada entre 1085 y 1090 y tuvo su máximo apogeo en la Edad Media, con figuras como Isabel La Católica, su hermano el infante Alfonso, su madre Isabel de Portugal, San Ignacio de Loyola, muchos nobles y caballeros de la época, como protagonistas, una historia de la que hoy son testigos algunos de sus monumentos.

Arévalo es una ciudad monumental que posee un conjunto histórico artístico de los más completos de Castilla. La Ermita de La Lugareja, joya del arte mudéjar de Castilla; San Martín, en la que destacan sus 2 torres; el Castillo, que es también silo de cereal; la Plaza de la Villa, porticada medieval, que te transportará a otra época; sus puentes medievales de entrada a la ciudad, sus casonas y palacios nobiliarios o su muralla os sorprenderán.

Arévalo es tierra de cereales, legumbres y asados. En los restaurantes de la ciudad se puede degustar el mejor cochinillo o tostón asado del mundo, acompañado de un plato de las afamadas legumbres de nuestra comarca La Moraña.

Arévalo, también es una ciudad en la que poder disfrutar de la naturaleza en todos sus sentidos. La población está asentada en medio de la llanura castellana entre 2 ríos el Adaja y el Arevalillo, rodeada de un paseo fluvial transitable a pie en su totalidad. Sin olvidarnos sus hermosos pinares.