El día 6 de abril, se celebra el Día Mundial del Deporte y resulta que la Organización Mundial de la Salud nos recomienda al menos 60 minutos de deporte al día en los más pequeños en un intento por luchar contra la obesidad y otras enfermedades derivadas del sedentarismo.  Así que hemos encontrado la excusa perfecta para poner a los niños en marcha (¡y nosotros también!) para que hagan un poco de ejercicio. Os contamos cuáles son algunos de los deportes más beneficiosos para los niños y que menos salen en la tele.

Hace unos días saltaba a la luz un video que inmortalizaba una conversación entre padre e hijo (6 años) viendo juntos un partido del Betis en el campo del Espanyol donde queda claro que el deporte es un entorno ideal para enseñar valores, para que los niños aprendan mucho más que a marcar gol, para que aprendan a respetar.

Hoy, además, hemos querido centrarnos en deportes conocidos pero que se encuentran entre los menos practicados. Sin duda hay uno (dos como mucho) que se llevan la palma en cuanto a seguimiento y es genial, pero seguramente no hace falta que os contemos los beneficios de estos.

Algunos de estas recomendaciones nos las hacen desde Colegios Brains, que se basan en su experiencia y en estudios realizados entre sus alumnos porque, como dice su jefe del Departamento de Educación Física de Secundaria y Bachillerato: “El deporte enseña a los niños reglas, que más tarde incorporan a su rutina y aplican en el ámbito familiar o en el colegio”. ¡Esta es nuestra selección!

Hípica

 El contacto con los animales y la educación en el respeto a ellos es una de las grandes ventajas de este deporte que además se basa en la disciplina, la postura, el afán de superación… Todo esto teniendo en cuenta que la mayoría de las veces se desarrolla en plena naturaleza lo hacen ideal.

Esgrima

Un deporte poco popular pero de los que todos sus adeptos aseguran que engancha como pocos. La postura, el reto, el respeto por el contrincante, el equilibrio… todos son aspectos que se trabajan mucho cuando se realiza. Son solo algunos de sus beneficios, pero hay muchos más que hace un tiempo nos contaban desde el Club de Esgrima de Madrid.

Paintball

Un deporte moderno con muchos, muchos aficionados (en Estados Unidos, más de 10 millones lo practican con frecuencia) que se puede practicar desde más o menos los 10 años (momento en que las máscaras de seguridad ajustan bien a las cabezas de los niños). Como nos dice Marco, de Planet Reball, “con el equipamiento adecuado, el paintball es un deporte seguro, divertido que hace que los niños creen estrategias en equipo y se sientan dentro de un videojuego, lo que en muchos casos sirve de grandísimo estímulo para seguir jugando”.

Waterpolo

Aunque la oferta es inferior, es una opción ideal para los niños que amantes de la competitividad y el deporte de equipo. Es uno de los deportes más recientes (se creó en 1870 en Inglaterra como versión acuática del fútbol) y se trata de un deporte muy saludable para trabajar la resistencia y el sistema cardiovascular.

Escalada

A nivel físico ayuda en la coordinación, equilibrio, flexibilidad… epro sus grandes ventajas, desde nuestro punto de vista, vienen por su poder pedagógico. La escalada ayuda a superar los miedos, desarrolla el espíritu de compañerismo, responsabilidad a la hora de tomar decisiones…

Ajedrez

El deporte más controvertido porque la situación en que se juega no tiene nada que ver con los demás, algunos dicen que potencia la vida sedentaria… y en cuanto a postura, tienen razón, pero tiene otras muchas ventajas como desarrollar en el niño la capacidad crítica, visión estratégica y agilidad mental. Ejercita la memoria y potencia el pensamiento empático al considerar los posibles movimientos del contrincante.

Cómo véis, hemos dejado de lado los más populares: fútbol y baloncesto e incluso la natación que evidentemente merecerían estar en la lista no solo por sus beneficios, sino por su gran número de seguidores. Esperamos que algunos de los mencionados os inspiren para acercar a ellos a vuestros hijos a estos.

Y vosotros, ¿por cuál os decantáis? ¿Cuáles practican vuestros peques?